VIAJE A EDIMBURGO: El regreso

Mi intención era mantener el blog lo más actualizado posible, pero ya se sabe : El infierno está empedrado de buenas intenciones. Ains!!Quizá he retrasado la elaboración de esta entrada, por que es la última de nuestro maravilloso viaje a Escocia, y una vez la termine, será como cerrar una puertita que nos conectaba directamente a esas tierras bárbaras (cuando me pongo poética no hay quien me pare).
Me centro; como nuestro avión no salía hasta las 18:30, nos encontramos con toda la mañana y parte de la tarde para callejear. Parándonos a pensar, en todos nuestro paseos por la Royal Mile no habíamos llegado nunca al Palacio de Holyrood ( principal residencia de los reyes y reinas de Escocia).

Este palacio se puede visitar durante todo el año, siempre y cuando la excelentísima reina de la Gran Bretaña no se encuentre por la ciudad (God save the Queen!). El precio de la visita sencilla es de 11 libras (ou yeah!).Pasando que es gerundio!
En frente de Holyrood se encuentra el Parlamento escocés, un edificio moderno y esperpéntico que les costó un ojo de la cara a los abnegados contribuyentes escoceses. El arquitecto encargado de tan magno edificio es español (como no!!). Enric Miralles, siguiendo la más clásica tradición española, presupuestó la construcción por unas librillas de na, consiguiendo durante su construcción multiplicar por 10 su precio inicial (Que viva España!!)
El resto de la mañana lo dedicamos a callejear por los "close" y a terminar con nuestras compras. Volviendo a nuestro apartemento para recoger las maletas, paramos a hacernos las fotos pertinentes en el túnel y las escaleras donde Renton (protagonista de Trainspotting), casi es atropellado por un coche en el monólogo inicial de la película (frikismo al poder)

Haciendo parada para comer en un Tony Macaroni (sí, es cierto, alguien le puso ese nombre a un restaurante.Los detalles ya los contó mi hermana en una entrada anterior); nos fuimos a coger el macuto y directas a Waverly Station para pillar el bus (Airlink 100) que va directo al aeropuerto (en 30 minutos aprox) por 4.50 libras. El bus de línea normal es mucho más barato (1.50 libras), pero tarda más de una hora (el precio no compensa el tiempo, creemos)
Tristemente, volvimos a España, aunque las grandes sensaciones que nos dejó este viaje tardarán tiempo en desaparecer.

Bonus track:

-En todos los baños (tanto públicos como de pubs) sale agua caliente, hay papel higiénico y están bastante limpios (5 gallifantes para Escocia!!)
-Las paradas del bus en algunas calles no miran hacia la carretera, si no al lado contrario, suponemos que para evitar la lluvia
.El papel higiénico Scotex se llama de otra manera...Apex?Alex?Acex?...cachis!!!! (es normal que le cambiaran el nombre.jajajaja)
-La cerveza lagger escocesa más barata y consumida es la Tenans (su mahou particular)
-En Edimburgo está prohibido escupir en la calle, excepto en El corazón de Midlothian
-En casi ningún pub te atienden en la mesa, tienes que ir a la barra si no quieres morir de sed.
Y sin más....hasta otra Escocia!!

David Hume disfrutando de la música