La obra me gusta, pero tampoco es que me fascine. Es casi una excusa para colar una frase de Cicerón que me parece sublime. "¿Hasta cuándo, Catilina, abusarás de nuestra paciencia?".
Cicerón la pronuncia refiriéndose al senador Lucio Sergio Catilina en el 63 ac en Roma. Catilina, acusado de actitudes poco honestas, se negaba a dejar su cargo. El gran jurista Cicerón, con su maravillosa retórica, se esforzaba en que Catilina admitiera sus errores: "¿En que país del mundo estamos? ¿qué gobierno es el nuestro?". Pero el acusado contaba no solo con su voluntad sino también con la de los que temían perder, si renunciaba, todos sus privilegios políticos. En la pintura se ve como aparece con actitud de "quien oye llover".
Finalmente, el caradura fue arrinconado y se tuvo que refugiar en Etruria hasta su muerte; pero Cicerón tampoco tuvo un final feliz. Fue separado del Senado por Julio César y asesinado en el 43 ac.
Las cosas no cambiaron mucho desde entonces ¿verdad?.
No hay comentarios:
Publicar un comentario